Resumen de Guías clínicas para el tratamiento del asma. ¿Son útiles?
Martín Navarro, María del Mar Romero Pérez, Guadalupe Pérez Pérez
Las diferentes guías clínicas para el manejo del paciente asmático se han convertido en los últimos años en documentos de referencia para cualquier iniciativa relacionada con el asma y han supuesto uno de los mayores avances en la racionalización del manejo de estos pacientes.La amplia difusión e impacto a nivel mundial de algunas de estas guías ha permitido a médicos generales y especialistas disponer de una valiosa información para asumir el tratamiento de un importante número de pacientes, dada la elevada prevalencia esta enfermedad.Con el éxito de las guías se han ido sucediendo un número, quizás demasiado extenso, de guías, consensos, protocolos, etc. no siempre basados en el análisis de las mejores evidencias científicas.Muchos de estos documentos van bastante más allá de la simple exposición del tratamiento del asma y ofrecen información detallada sobre los distintos aspectos de la enfermedad (etiología, diagnóstico, clasificaciones de gravedad, enfoque terapeútico, prevención).Tanto la GINA (Global Iniciative for Asthma) como la guía británica, la del grupo de expertos del NAEPP o la Canadiense son guías generales, desarrolladas, tanto para adultos como para niños y esto implica algunos problemas debido a que el comportamiento del asma en el adulto es muy diferente al del niño pequeño o lactante. La categorización del asma en leve intermitente, asma leve persistente, asma moderado y asma grave que se utiliza en la mayoría de las guías, es difícil de aplicar en el niño pequeño.La GEMA (Guía Española para el Manejo del Asma) es una guía diseñada, tanto para adultos como para niños, pero su parte pediátrica ha sido de-sarrollada de forma bastante independiente de la del adulto, y de hecho contempla una clasificación específica para el niño.Uno de los consensos más actuales es el alcanzado entre las Sociedades Españolas de Neumología Pediátrica, Inmunología Clínica y Alergia Pediá- tiica, Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria y Urgencias de Pediatría. Este documento presenta como ventajas que se enfrenta de forma clara al problema del niño pequeño con sibilancias recurrentes, aspecto por el que otras guías pasan de puntillas o ni siquiera tratan, analiza diferentes fenotipos clínicos y ofrece una clasificación del asma mucho más aplicable al niño pequeño.Como conclusión podemos decir que la lectura de la CIÑA, la GEMA, el Consenso canadiense o el del grupo de expertos del NAEPP, sería aconsejable para hacer una revisión en profundidad del problema del asma, y el Consenso sobre el tratamiento del asma en Pediatría podría considerarse como la guía práctica para el trabajo diario con los pacientes pediátricos.
