Las medidas para la conservación del pez espada adoptadas por Chile encontraron la fuerte oposición de la Unión Europea, que decidió recurrir contra Chile ante los mecanismos de solución de controversias de la OMC. Por su parte Chile, resolvió recurrir al Tribunal del Mar para establecer su derecho a tomar medidas de conservación en el alta mar adyacente a su zona económica exclusiva. Si bien, por ahora, ambos procedimientos se encuentran suspendidos, es interesante revisar las fortalezas y debilidades de la posición chilena.La fuerza efectiva que puedan tener los argumentos chilenos no sólo dependerá de la calidad argumentativa de los mismos sino también de las posibilidades de Chile de enfrentar el conflicto sustantivo de normas que subyace a esta controversia y de hacer prevalecer las normas que más favorecen su posición. Asimismo, la controversia plantea un conflicto de jurisdicción que agrega un elemento más de complejidad a la disputa, con el riesgo de que se obtengan decisiones jurisdiccionales contradictorias, lo que favorecería, en definitiva, a la parte que tenga mejor capacidad negociadora y al mecanismo de solución de controversias que cuente con los medios de presión más eficaces para asegurar el cumplimiento de la respectiva decisión.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados