Pedro Vallina Martínez (1879-1970), médico de profesión y apasionado defensor de los más débiles, se compromete desde muy joven con el ideario anarquista y muy pronto se relaciona con los líderes de este movimiento, convirtiéndose en uno de los más activos representantes de la causa antimonárquica y anarquista en el primer tercio del siglo XX en España. Su participación, a veces real y otras supuesta, en agitaciones violentas le llevan a ser encarcelado en varias ocasiones y a sufrir destierros como los que le trajeron a varios pueblos de la Siberia Extremeña. En Siruela, la lectura de las sesiones plenarias nos ha permitido comprobar la implicación del doctor Vallina en la vida y política municipales, proclamando como comisionado gubernativo la República el 15 de abril de 1931, siendo alcalde de la población tras el triunfo del Frente Popular en febrero de 1936 o promoviendo la ocupación en 1935 de la finca del Duque de Fernán Núñez por parte de un sector del vecindario ávido de tierras que labrar para aliviar su deteriorada situación económica.
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