Tratamiento mediante compresión isquémica en el síndrome de dolor miofascial: estudio de 26 casos

• Autores: César Fernández de las Peñas, Josué Fernández Carnero, Cristina Alonso Blanco
• Localización: Fisioterapia y calidad de vida, ISSN 1575-4847, Vol. 6, Nº. 2 (Mayo / Agosto), 2003, págs. 23-30
• Idioma: español
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• Resumen

  • Objetivo: El objetivo de este estudio es evaluar la efectividad inmediata y a corto plazo (2 semana) de la técnica de compresión isquémica en el tratamiento del SDM a través de la medición del umbral de tolerancia a la presión y la escala analógica visual.

    Material y Métodos: Se estudiaron 26 pacientes voluntarios diagnosticados de síndrome de dolor miofascial, mediante el hallazgo de un punto gatillo miofascial en el trapecio superior.

    Para el diagnóstico del PGM se siguieron los criterios diagnósticos de Travell y Simons. El PGM estudiado se localiza en la parte media del borde anterior de las fibras más verticales del trapecio superior. Se dividió a los sujetos de forma aleatoria en dos grupos: grupo A y B. En el grupo A se analizó el efecto inmediato de la técnica de compresión isquémica; mientras que en el grupo B se analizó la evolución durante tres sesiones de tratamiento distanciadas una semana cada una de ellas.

    Se analizó el umbral de tolerancia a la presión (PPT) mediante un algómetro de presión analógica distribuido por la casa comercial "Pain Diagnosis and Rehabilitation", y la escala analógica visual (EAV). Se tomaron medidas algométricas antes y después del tratamiento; mientras que la escala analógica visual se pasó durante la ejecución de la técnica. En el grupo A se realizaron 2 mediciones en la misma sesión; mientras que en el grupo B se realizaron 6 mediciones (2 en cada sesión) durante las dos semanas de duración del estudio (3 sesiones). Los datos se analizaron con el SPSS.

    Resultados: Los resultados muestran una mejora inmediata en el umbral de tolerancia a la presión en el grupo A (p=0,002). En el grupo B también se encontró una mejora significativa en todas las sesiones de tratamiento. La Técnica de compresión isquémica no resulta especialmente dolorosa para el paciente (EAV =2,8) no encontrado diferencias significativas entre ambos sexos.

    Conclusiones: Los resultados obtenidos muestran que la técnica de compresión isquémica es efectiva en el tratamiento de PGM con respecto a la disminución de la sensibilidad dolorosa en el punto.

    Los pacientes mantienen la mejoría durante un tiempo (establecido en este estudio en una semana) sin tratamiento fisioterápico, siendo ésta acumulativa para sesiones sucesivas.

    Sin embargo, creemos en la necesidad de ampliar esta parte del estudio para sacar conclusiones más acertadas.