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Resumen de Un cuarto de siglo sin "Marilyn"

Angel Luis Rodríguez

  • Las "Marilyn", fueron unas locomotoras diésel-eléctricas, las primeras de línea de ese tipo en el parque de Renfe, que a su procedencia americana añadían unas marcadas formas curvas en su frontales y un peculiar vaivén en la marcha. Los años en que llegaron, 1954 a 1956, y el ingenio ferroviario bastaron para que las 1600, luego 316.000 fueran para siempre las "Marilyn".

    Aquellos años de esplendor artístico de Marilyn Monroe en el mundo coincidieron en España, y concretamente en el ferrocarril, con la incorporación al parque de tracción de Renfe de las primeras locomotoras de la serie 1.600- después llegarían las similares 1.800- procedentes de los Estados Unidos.

    Estas fueron las primeras locomotoras diésel eléctricas de línea en Renfe y estaban fabricadas en sus partes mecánicas por Alco y en sus partes eléctricas por General Electric. El motor de 1.600 caballos era un Alco 241 y permitía velocidades de hasta 105 kilómetros por hora con un esfuerzo de tracción de 20.800 kilos.

    Las 17 máquinas de esta serie con rodadura CoCo fueron siendo retiradas del servicio activo a medida que cumplían su vida útil y presionadas por la electrificación de la red. La última superviviente de la serie, la 1615, era peculiar por varias razones, la más significativa de ellas era que contaba con una única cabina de conducción. Además disponía de bomba de vació accionada por motor eléctrico independiente y transición manual de la conexión de los motores eléctricos de tracción.

    Tenía una longitud de 17.938 milímetros entre topes, una anchura de 2.997 y una altura de 4.216. Su peso en vacío era de 101 toneladas. Sus peculiaridades la apartaron del las del resto de la serie desde que fuera desembarcada en el puerto de Bilbao en 1955 y hoy casi 50 años después sigue siendo un caso peculiar, preservada en el Museo Nacional Ferroviario de Delicias.

    La 161 (316.015), la Marilyn por antonomasia, entró en revisión a principios de 1978 y en marzo fue dada la orden para su baja al depósito sevillano de Santa Justa. Después de 25 años, la locomotora es una de las piezas señeras del museo de Delicias y un capítulo importante de la historia del ferrocarril español.

    Tras su llegada a Bilbao, la 1615 fue traslada a Linares para prestar sus primeros servicios entre esa localidad y la de Santa Cruz de Mudela, pintada en azul y con número de matrícula DL-500. El ser mono cabina la obligaba a terminar en lugares donde existiera una placa giratoria o un triángulo para invertir el sentido de la marcha.

    Su vida activa transcurrió prácticamente en su totalidad en Andalucía, con apenas una temporada de "emigrante" con trabajos en la línea Valencia-La Encina-Alicante. Una año después de su llegada, en 1956, pasó a remolcar trenes de mercancías entre Sevilla y Cádiz y luego mercancías entre Córdoba y Sevilla y el expreso Barcelona-Sevilla.

    Pero su trabajo con viajeros no fue duradero, en 1959 la Marilyn, guiños del destino, vuelve, estadounidense como era, a sus orígenes y participa remolcando trenes de piedra en la construcción de la Base Militar de Rota, cubriendo el trayecto entre Gédula y El Salado, pasando por El Puerto de Santa María, Jerez de la Frontera y Rota.

    Entre sus hitos estuvo el récord que consiguió en las pruebas de rodadura remolcando el tren Cádiz-Madrid, "El pescadero" que fue el primero en Renfe que recorrió más de 700 kilómetros sin cambiar de locomotora para llegar, además con tres horas de adelante sobre el horario previsto.

    Su primer cambio de imagen, color plateado con franjas verdes, precedió a otro cambio, este de destino, para remolcar el Rápido mañanero Cádiz-Madrid, en su trayecto hasta Córdoba y vuelta con ocasionales recorridos nocturnos entre Cádiz y Jerez. En esos años también tiró del omnibus Ayamonte-Sevilla que enlazaba con el expreso Sevilla-Madrid.

    En 1960 fue de nuevo repintada para lucir un "vestido" verde con franjas amarillas, quizá la imagen más conocida de su serie y pasó a remolcar de nuevo el Rápido Cádiz-Córdoba alcanzando los dos millones de kilómetros recorridos.

    Sus dos últimos años, antes de la jubilación los pasó remolcando el Postal Entre Córdoba y Cádiz, y luego, tras la electrificación sólo entre Sevilla y Cádiz. Entonces la vieja Marilyn ya ponía numerosos problemas a la explotación que se hacía menos rentable.

    Su cambio de sentido debía hacerse a su legada a Sevilla llevándola hasta el triángulo de Los Rosales, en la línea de Mérida, lo que unido a la electrificación del tramo Sevilla-Cádiz, provocó su jubilación después de 23 años de servicio y muy cerca de los tres millones de kilómetros recorridos.

    Alcázar de San Juan. Ciudad Real, Santa Cruz de Mudela, Linares, Jaén, Córdoba, Sevilla, Jerez, El Puerto, Rota Cádiz, Valencia, La Encina, Madrid, Alicante... la guardan en su memoria ferroviaria. Pero Marilyn, como "norma", nunca abandona y todavía hace disfrutar desde su dorado retiro en Delicias.


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