Málaga, España
Los cambios producidos durante las últimas décadas, en el contexto social y educativo, hacen fundamental que los/as docentes posean un adecuado nivel de competencias emocionales, para que puedan dar respuesta a las incertidumbres y demandas educativas que en su profesión se les plantean. Por ello, en el presente trabajo se ha pretendido conocer el nivel de competencia emocional autopercibida por 227 estudiantes de primer curso, de los Grados de Maestro/a en Educación Infantil y en Educación Primaria en la Universidad de Málaga. Para ello se ha realizado un estudio de corte cuantitativo fundamentado en un diseño ex post facto descriptivo y correlacional, se ha empleado el Cuestionario de Desarrollo Emocional de Adultos (CDE-A), diseñado por Pérez-Escoda et al. (2010). En este estudio se pone de manifiesto, por un lado, que los/as participantes poseen una conciencia emocional poco desarrollada, es decir, tienen poca habilidad para identificar sus emociones, las emociones de otros/as, así como para captar el clima emocional. Por otro lado, el alumnado muestra una percepción adecuada en lo que respecta a las dimensiones vinculadas con la gestión de las emociones, desarrollo de una buena autoestima y una actitud positiva, establecer y mantener buenas relaciones con el entorno social y seguir comportamientos responsables ante la vida. Los datos también evidencian que, los/as estudiantes del Grado en Educación Infantil poseen un menor desarrollo de las competencias emocionales que el alumnado del Grado en Educación Primaria. Por ello, habría que estudiar y valorar en profundidad la conveniencia de contemplar en los planes formativos de los/as futuros/as docentes dicha dimensión competencial, con el objeto de que aprendan a gestionar mejor sus emociones, a trabajar la dimensión racional y emocional de sus estudiantes, y que sepan promover interacciones educativas con su alumnado para ajustar, las estrategias de enseñanza que promuevan igualdad, equidad y justicia social.
The changes produced during the last decades in the social and educational context, make it essential for teachers to possess an adequate level of emotional competencies, so that they can respond to the uncertainties and educational demands that are posed to them in their profession. For this reason, the present work has tried to know the level of self-perceived emotional competence by 227 first-year students of the Teacher's Degrees in Early Childhood Education and Primary Education at the University of Malaga. For this, a quantitative study based on an ex post facto descriptive and correlational design has been carried out, the Adult Emotional Development Questionnaire (CDE-A), designed by Pérez-Escoda et al., (2010) has been used. This study reveals, on the one hand, that the participants have an underdeveloped emotional awareness, that is, they have little ability to identify their emotions and those of others, as well as to capture the emotional climate. On the other hand, the students show an adequate perception regarding dimensions related to the management of emotions, the development of good self-esteem and a positive attitude, establishing and maintaining good relationships with the social environment and following responsible behaviors towards the lifetime. The data also show that students of the Degree in Early Childhood Education have a lower development of emotional competencies than the students of the Degree in Primary Education. For this reason, it would be necessary to study and assess in depth the convenience of contemplating this competence dimension in the training plans of future teachers, so that they learn to better manage their emotions, and to work on the rational and emotional dimension of Their students, learn how to promote educational interactions with their students to adjust teaching strategies that cause equality, equity and social justice.
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