El paréntesis «(alga todo y espumas)» de la Soledad primera (v. 26) de Góngora no ha logrado despojarse aún de la etiqueta de locus oscuro que se le viene asignando desde los tiempos de Pellicer (Lecciones solemnes, 1630). El presente artículo pasa revista a las opiniones críticas al respecto y sugiere una nueva tesis a la luz de cuatro fuentes espigadas de la poesía de Catulo (carmen 64), Ovidio (Metamorfosis, XI, vv. 410-748), Ariosto (Orlando furioso, cantos X-XI) y Luis deCamoens (el soneto «Como quando o mar tempestuoso»).
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados