En esta comunicación pretendemos demostrar que una persona, aunque tenga una ligera deficiencia cognitiva, puede ser un buen informante para la recopilación de materiales de tradición oral.
Con esta finalidad, entrevistamos a una persona de nuestro pueblo, Julián Gutiérrez Carrasco, de 72 años, a quien mucha gente considera, entre comillas, “algo retrasado”.
Nuestro deseo es que este trabajo aporte un granito de arena a favor de estas personas, comprobando cómo nuestro informante, pese a su deficiencia, ha ido atesorando por tradición oral, a lo largo de su vida, un acervo de conocimientos que supera al de muchas personas de las que denominamos “normales”.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados