La política de las empresas respecto al ruido en el trabajo se centra muy a menudo en la evaluación del riesgo y en la salud. Las soluciones, cuando se adoptan, se limitan a los protectores acústicos y se fían a proveedores que suelen proponer cierres para los equipos o amortiguadores de ruidos. Pero el ámbito de estas soluciones es mucho más amplio e inlcuye medidas técnicas y de organización. La empresa debe conocer el mayor número posible de estas medidas para elegir la más adecuada. Como ayuda le puede servir un análisis del problema del ruido, para lo que dispone de herramientas de medida y cálculo y de buena documentación.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados