Desde sus comienzos, la buena acogida del castellano en Hong Kong y el crecimiento del interés por nuestra lengua han sido realmente notables. Por ello, la atenta observación del desarrollo de su enseñanza/aprendizaje en este punto geográfico podría, por una parte, servir para controlar la calidad de este interés naciente por lo hispanohablante y para potenciar un crecimiento aún mayor a la vista de las condiciones favorables para ello. Por la otra, será sin duda de gran utilidad para implementar programas de enseñanza de español en otras zonas, especialmente en lugares donde la presencia del castellano sea casi nula, como lo era aquí hace apenas treinta años.