Francisco Sánchez, Arancha Asenjo
Nacieron en medio del ruido del boom tecnológico y con mucho ruido propagaron su "buena nueva". Pero, poco a poco, las siglas ASP (Application Service Provider) fueron entrando en un silencioso letargo. Sin embargo, hoy el concepto sigue vivo gracias a una segunda generación de ofertas que -bajo distintas denominaciones y variantes- coinciden en suministrar el software como servicio (SaaA-Software as a Service).
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